jueves, 6 de noviembre de 2008

El juez Garzón ordena exhumar del Valle de los Caídos a ocho fusilados

_

El juez Garzón ordena exhumar del Valle de los Caídos a ocho fusilados

NATALIA JUNQUERA

El magistrado autoriza la primera recuperación de cuerpos de víctimas de la guerra sin consentimiento de sus familiares

El juez Baltasar Garzón ha autorizado la exhumación de los cuerpos de ocho republicanos, siete hombres y una mujer, que fueron enterrados sin el conocimiento ni el consentimiento de sus familiares en el monumento que Francisco Franco levantó para conmemorar su victoria y homenajear a los muertos del bando nacional. Es decir, la exhumación de "la caja colectiva o columbario 198, piso 1º, de la Cripta derecha y caja individual 10.672, piso 1º, Cripta África de la Basílica del Valle de los Caídos".

El equipo de expertos inicia su labor
El Supremo tramita dos querellas contra el juez
Condenado el director de 'El Mundo' por difamar a Garzón

"Vamos a recuperar a mi padre, a mi tío y a los otros seis fusilados de Pajares de Adaja. Estoy muy contento. Poco a poco, se van cumpliendo nuestros deseos", explicó Fausto Canales, de 74 años, hijo de Valerico y sobrino de Fidel, dos de los ocho republicanos cuyos cuerpos "robó Franco". "Le voy a pedir a los expertos -el equipo de siete especialistas que Garzón ha pedido que le asista en la causa- que elabore un proyecto de exhumación en el Valle de los Caídos. Sé que se van a plantear dificultades, pero esto no debe ser distinto a cualquier otra exhumación", añadió.

Recuperar los restos del mausoleo no va a ser fácil. Tras la puerta que preside la inscripción "Caídos por Dios y por España 1936-1939", hay un sinfín de nichos -los expertos estiman que entre 40.000 y 60.000- inaccesibles. Canales lo comprobó con sus propios ojos en su penúltima visita al Valle de los Caídos -sólo volverá para llevarse a los suyos a casa, dice-. "Las zonas de columbarios están selladas con chapas de mármol y no son accesibles, pero no es difícil, me pareció, adivinar dónde estaban las puertas de entrada de acceso a ellos", explicó. El mármol no es el único problema. "El benedictino que me señaló el lugar exacto", añadió Canales, "me manifestó que no era partidario de sacar los restos de allí".
En la caja colectiva que Garzón ha autorizado a recuperar del Valle de los Caídos están Valerico Canales, Celestino Puebla, Emilio Caro, Flora Labajos, Pedro Ángel Sanz, Román González y Víctor Blázquez, miembros de la Casa del Pueblo de Pajares de Adaja (Ávila). Fueron fusilados el 20 de agosto de 1936 por un grupo de falangistas, arrojados a un pozo en desuso en Aldeaseca, un pueblo cercano, y desenterrados 23 años después por un grupo de hombres, que siguiendo órdenes de la misma autoridad que había determinado su muerte, desenterró a los siete republicanos y los trasladó al Valle de los Caídos cuando faltaba un mes para inaugurar el monumento. La caja individual corresponde a Fidel Canales, que murió en el frente y estuvo enterrado en el cementerio de Griñón (Madrid) hasta que el 30 de diciembre de 1968 se depositaron sus restos en el Valle de los Caídos.
Acabaron allí porque muchas viudas de soldados franquistas no autorizaron el traslado de los restos de sus maridos al monumento de Franco. El régimen necesitaba cuerpos para alimentar aquella enorme cripta, cuya construcción se demoró 20 años, y el Ministerio de la Gobernación los pidió por carta a ayuntamientos de toda España, rogando además, que respondieran "con la mayor brevedad posible". Muchos municipios contestaron que no tenían muertos del bando nacional, pero sí "fosas del ejército rojo". Y Franco cambió su criterio inicial.

El equipo de expertos inicia su labor
El equipo de expertos al que el juez Garzón ha pedido que desarrolle las labores de búsqueda y localización de víctimas de la Guerra Civil y la dictadura para atender las peticiones de sus familiares "en un plazo razonable" se reunió ayer por primera vez con el equipo de policía judicial para decidir, entre otras cosas, por dónde empezar. La primera tarea será digitalizar toda la información que las asociaciones de memoria histórica han ido aportando al juez. "El Ministerio de Justicia va a facilitarnos una aplicación inteligente, es decir, un programa informático que se llamará Memoria Histórica, para ordenar toda esa información. Nos han dicho que puede estar listo en un mes", explicó Fernando Magán, abogado de los denunciantes.

A la reunión asistieron cinco de los siete expertos del grupo: los historiadores Francisco Espinosa y Queralt Solé, el médico forense Francisco Etxeberria, el ex presidente de la Audiencia de Barcelona Antonio Doñate y Manuel Escarda, médico forense que sustituye a la historiadora Maribel Brenes en el grupo. Al encuentro en la Audiencia Nacional, no pudieron asistir el ex fiscal anticorrupción Carlos Jiménez Villarejo (designado por Garzón) ni el historiador Julián Casanova (elegido por las asociaciones), en Washington.

Los expertos utilizaron la reunión para definir sus primeras necesidades. De momento, les han pedido que guarden las facturas de sus desplazamientos.
_

1 comentario:

escenavegant dijo...

Mi padre hubiera dado su vida por ver volar el Valle de los Caídos. El, voluntario del PSUC en la guerra civil, perteneció a esa mayoria acallada en la posguerra, vigilada durante décadas (con llamadas de madrugada). El no consiguió superar el milenio, però estoy seguro que si pudiera leer esta noticia seria feliz. Abrir el bunquer franquista con una orden judicial, en un estado democrático, es una pequeña victoria ante aquellos que tiemblan al escuchar la expresión "memoria histórica". Aquellos que eran felices después de una amnistia con ruido de sables. Aquellos que han sabido ganar la partida al tiempo hasta conseguir que muy pocos responsables -criminales contra la humanidad, segun la legislación internacional vigente- se mantengan con vida gracias a la demora.
Salut!

¿DONDE ESTA?

¿DONDE ESTA?
IN MEMORIAN